¿Cómo gestionar la temporada baja en tu hotel?

Entendemos por temporada baja la época del año en la que es menos abundante el turismo. Ante todo, hay que tener en cuenta que en función del destino al que nos referimos, la temporada baja se centra en unos meses u otros.

Por ejemplo, en destinos de costa, la ocupación disminuye en los meses más fríos y aumenta considerablemente en los meses de verano, en los que hace más calor. Un caso especial es Sevilla, que consiguió mantener una alta ocupación durante todo el año 2017. La tendencia de períodos anteriores era cerrar o minimizar los servicios durante el periodo estival, sin embargo, esta corriente se ha conseguido eliminar gracias a los más de millón y medio de extranjeros que visitaron la cuidad durante estas fechas, según datos del INE.

Pero, ¿qué se aconseja a la hora de mejorar la ocupación de un hotel durante temporada baja?

En primer lugar, se recomienda tener planificada la campaña con antelación, de esa manera obtendrás margen de tiempo para pensar qué estrategias vas a seguir o qué ofertas crees que van a funcionar mejor.

Por otro lado, cada vez más turistas prefieren viajar en aquellos meses en los que los destinos no están masificados, para poder disfrutar del lugar más tranquilamente. Se puede sacar partido a esa posibilidad con descuentos especiales y promociones atractivas. Si, por ejemplo, quieres incentivar las reservas en verano, puedes ofertar planes alternativos más propios de temporada estival. Por ejemplo, visitar un pueblo colindante, miradores, playas o lagos cercanos, etc.

Es muy importante que durante estas fechas tus trabajadores realicen sus labores de la mejor manera posible ya que, cuando la ocupación es baja es el mejor momento para centrarnos en el bienestar de los clientes y fidelizarlos para una posible reserva futura.

Una grata experiencia con el servicio de habitaciones garantizará que el cliente valore la posibilidad de volver a escoger tu hotel en el futuro. Le Room Service se compromete a ayudar a alcanzar esta meta y hacer que esta área del hotel sea sobresaliente, pudiendo ofrecer nuestro servicio más allá de la habitación. Por ejemplo, si tu hotel cuenta con terraza, el huésped puede disfrutar de una agradable cena al aire libre.  Es importante que la experiencia que tengan los huéspedes sea la mejor posible y solo con una buena gestión del room service se puede conseguir.

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